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| Why, Vero, why! Imagen: Twitter de Verónika. |
La última encuesta de CPI, realizada en enero de este año, ha traído una gran sorpresa: Julio Guzmán ha subido en la tabla de posiciones. Fuera de esto, la encuesta de CPI no muestra otras grandes novedades. Keiko sigue primera (32.1%), Acuña segundo (15.2%), PPK muy cerca de Acuña (13.1%), y Alan muy por detrás de Acuña (7.2%).
Julio Guzmán ahora está
quinto con un honroso 5%. ¿Y Verónika Mendoza? Pues se ha quedado muy atrás de
Julio con un 2.3% de intención de voto.
Para muchos, esto se veía venir. La gran aceptación de Julio Guzmán en redes sociales, la simpatía que ha despertado su candidatura entre los jóvenes y, sobre todo, su gran estrategia de campaña, que va desde subirse a los micros hasta volantear en las grandes plazas municipales, ha hecho que Julio Guzmán se encuentre ahora donde está.
Para muchos, esto se veía venir. La gran aceptación de Julio Guzmán en redes sociales, la simpatía que ha despertado su candidatura entre los jóvenes y, sobre todo, su gran estrategia de campaña, que va desde subirse a los micros hasta volantear en las grandes plazas municipales, ha hecho que Julio Guzmán se encuentre ahora donde está.
Por su parte, se dice que Verónika ha llegado a su techo, que no subirá más en las encuestas. ¿Por qué? Simple: Su mensaje no llega a los oyentes.
El politólogo Carlos León
Moya, simpatizante de Verónika, ha hecho una crítica interesante sobre la performance de Vero en las entrevistas
que le realizan:
“Tiene que ser precisa,
concreta, rápida. No puede dar respuestas de cuatro minutos a preguntas tan
concretas. Si te preguntan por Venezuela y Espinar, no puedes empezar a
conceptualizar qué es la libertad de expresión y qué es el derecho a la
protesta y cómo se aplica en algunos casos y en otros no durante tres minutos.”
(Tomado del Facebook de Moya).
Y sobre desempeño en entrevistas,
Julio Guzmán le lleva amplia ventaja. El discurso de Julio es concreto, breve,
directo, ¡poco floro!; lo que, en estos tiempos, resulta eficaz a la hora de
ganar simpatizantes.
Aquí un ejemplo de la performance de Vero y de Julio. Vean las diferencias.
Este es Julito en el programa Cuarto Poder.
Y aquí Vero en el programa de Althaus. (¡No nos juzguen!).
Si Verónika no cambia de estrategia, si no cambia su manera de llegar al votante indeciso, quedará estancada en ese 2% que actualmente tiene. ¿Es una situación irreversible? No, muchos dicen que aún puede remontar en las encuestas. Pero de que tiene que hacer cambios drásticos al interior del Frente Amplio, claro que los tiene que hacer.
“No sé qué tenga que pasar:
si haya gente de campaña que deba irse a su casa -seguro que sí- o si se deberá
meter más gente, si va a tener que hacerse una rifa para pagar un media training o si alguien va a tener
que dejar la soberbia de lado y empezar a escuchar a quienes dicen que, en comunicación,
están haciéndolo mal. Pero o se replantea absolutamente todo, o nos hundimos.”
(Tomado del Facebook de
Moya).
Yo
también pienso votar por Vero, pero también es verdad que algo no está
funcionando en su campaña y que debe de cambiar. Finalmente, hago mías estas
palabras de Emilie Kesch sobre la candidatura de Verónika.
"Vero, no hagas que te
olvide, que nos olvidemos de ti. Deja de rompernos el corazón y de
decepcionarnos. No vamos a darte la otra mejilla toda la vida, no vamos a
defenderte hasta junio mientras tú sigues dando tumbos y colocándote taras. Te
queremos, pero también podemos cansarnos. Acepta que estás mal. Todavía estamos
a tiempo, Vero.”
(Tomado del Facebook de
Emilie Desch).
