Luego de que se conociera la
noticia de que el Estado peruano, mediante un mandato judicial, finalmente
puede distribuir gratuitamente el Anticonceptivo Oral de Emergencia (para los
amigos: “la píldora del día siguiente”), un sector de la sociedad ha pegado el
grito al cielo sosteniendo que la “píldora del día siguiente” es abortiva.
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¡Te digo que no es abortiva, oye! Imagen vía: monicagallegos10.blogspot.com |
Ante dicha afirmación, la
ministra de Salud, Patricia García, ha salido al frente a aclarar tamaño error.
En declaraciones a la prensa, la ministra García sostuvo:
“Hay
suficiente evidencia científica. No es una píldora abortiva. Es lo que se llama
una píldora anovulatoria, porque básicamente lo que hace es que impide que el ovario libere el óvulo, si no hay óvulo no hay concepción y si no
hay concepción no hay aborto.”
Asimismo,
el médico más querido de todo el Perú (no, no es el Dr. TV), el doctor
Elmer Huerta, también ha afirmado que “la píldora del día siguiente” no es
abortiva. En su cuenta de Twitter (@drhuerta), escribió:
“Al
impedir ovulación, no hay
fecundación y no se forma huevo que se
implante. Si no hay implantación, no
hay aborto.”
En
declaraciones a RPP TV, el doctor Huerta hace referencia a un estudio realizado
por la Universidad de Princeton en julio de este año donde concluye que -según palabras
del doctor- “el mecanismo de acción de la
píldora del día siguiente no es más que las mismas hormonas que usan las
señoras en 28 días, y lo que hacen es impedir que el ovario elimine un óvulo.”
La OMS sostiene que “la píldora del día siguiente” no es abortiva.
En
una Nota publicada en febrero de este año, la Organización Mundial de la Salud señala:
“Las
píldoras anticonceptivas de emergencia de levonorgestrel y acetato de
ulipristal (o “píldora del día siguiente” en sus dos
versiones) previenen el embarazo impidiendo o retrasando la ovulación.
También pueden impedir la fertilización
de un óvulo por su efecto sobre el moco cervical o la capacidad del espermatozoide de unirse al óvulo.”
Las píldoras anticonceptivas de
emergencia de levonorgestrel no son eficaces una vez que ha comenzado el
proceso de implantación y no pueden
provocar un aborto.”
Y para no
dejar dudas al respecto, podemos leer más adelante en la Nota:
“Las píldoras anticonceptivas de
emergencia de levonorgestrel solo y de acetato de ulipristal son seguras y no provocan el aborto ni
afectan a la fertilidad futura.”
En el caso
de que una mujer que no sepa que está embarazada tome “la píldora del día
siguiente”, la OMS señala:
“Si una mujer las toma sin saber
que está embarazada, los datos disponibles indican que los medicamentos no perjudicarán ni a la mujer ni al feto.”
Cabe recordar
que “la píldora del día siguiente” no es un método anticonceptivo más, sino que
es un método anticonceptivo ¡de emergencia!; es decir, que se emplea solo en el
caso de que los métodos anticonceptivos habituales hayan fallado (¡se rompió el
condón!, por ejemplo) o se haya tenido relaciones sexuales sin protección. Su uso
frecuente acarrea efectos secundarios. Así lo afirma la OMS:
“El uso de píldoras
anticonceptivas de emergencia está recomendado de forma ocasional solamente después de relaciones sexuales sin protección y
no se recomienda como método
anticonceptivo de uso regular porque existe una mayor posibilidad de fracaso que con las píldoras
anticonceptivas habituales. El uso frecuente de la anticoncepción de emergencia
puede tener mayores efectos secundarios,
como la irregularidad menstrual, aunque no se ha establecido que su uso
repetido constituya un riesgo para la salud.”
Luego de
todo lo expuesto, que sigan habiendo hoy en día grupos que sostengan que la “píldora
del día siguiente” es abortiva, demuestra no solo falta de información, sino también
terquedad, incluso cierto grado de fanatismo, de aquellos que todavía pretenden tapar el sol
con un dedo.